El campamento estaba en un lugar precioso, todo el mundo fue muy amable desde el primer día y me hicieron sentir como en casa. Aprendí mucho de otros monitores y de las niñas, así como de todas las tradiciones y canciones del campamento. A medida que pasaban los días estaba más segura con mi inglés y con todo el mundo. Me divertí mucho enseñando natación. Recomiendo totalmente esta experiencia a todos, que te hace crecer como persona y darte cuenta de todas las cosas buenas que la gente puede traer y todo lo que puede aprender de otra cultura.  Como mi campamento diría LIVE JUICY!