Fue una experiencia única tanto por gente, lugares visitados, cultura, dinero ahorrado, inglés y trabajo fuera, sin nadie conocido cerca y sacándote las castañas del fuego tú solo, ya que aunque no hubo ningún problema en ningún sentido, no había nadie cerca conocido como si estuvieras en casa.

La verdad es que no me arrepiento en ningún momento de haber realizado esta experiencia en Squaw Valley (California), y tuve la suerte de visitar mucho de costa a costa y sin tener que gastar dinero de la cuenta española, y de poder volver con dinero y recuerdos inolvidables de esta gran experiencia.

Se lo recomiendo a todo el mundo que quiera descubrir y conocer nuevos mundos, ya que no es un viaje de turismo, es una forma de vida nueva que tristemente se pasa volando 🙁 Pero si miras la aventura y luego no la realizas, cuando seas más mayor te tirarás de los pelos por la aventura desperdiciada.