Recomiendo esta experiencia profesional y personal a todo aquel que quiera probar una cultura y país diferente. Como arquitecto gracias al visado J1 he podido ampliar mis conocimientos en el modo de construir y diseñar en Estados Unidos, lo cual es seguro que me reportará beneficio en mi futuro profesional. El hecho de tener que aprender unos sistemas, normativas y modos de construcción totalmente nuevos hace que aprendas a adaptarte y buscar soluciones lo cual resulta en aprovechar al máximo la capacidad de exigencia propia. Dejando de lado el aspecto prefesional he podido conocer una ciudad maravillosa como es Nueva York y hacer realidad el sueño de todo arquitecto de dejar su pequeño sello en esta ciudad icono del siglo XX. Como resultado de todo esto siento que la experiencia ha sido increíblemente positiva y animo a todo aquel que tenga alguna duda al respecto que no lo dude y contacte con Travelingua, que han sido muy amables y atentos durante todo el proceso de gestión del visado y lo que es más importante, me han permitido hacer realidad una de las experiencias mas increibles de mi vida.